Bien, empecemos por el SEO (o Search Engine Optimization, por sus siglas en inglés), que se traduce como «Optimización para motores de búsqueda». Un motor de búsqueda es como el bibliotecario de internet, le pides cierto libro y te responde con el lugar exacto de donde lo puedes encontrar; o le pides un tema en específico y te da la sección donde puedes hallar respuestas.

Para esto, el bibliotecario tendría que saberse exactamente la ubicación de cada libro, o bien, tener un registro, ya sea físico o virtual.

Una de las maneras de hacer esto en con SEO. Se logra gracias a palabras claves, etiquetas, el propio contenido de la página en general. Los algoritmos de los motores de búsqueda se manejan mediante palabras clave, ficheros enviados al propio motor, e incluso reviews de los propios usuarios.

Una de las ventajas del SEO es que es duradero en el tiempo, es decir, todas las configuraciones y ediciones que se hagan repercutirán a largo plazo, ya que usualmente los enlaces indexados en las cachés de los buscadores suelen mantenerse, pero eso es otro tema. Lo que tienes que entender es que lo que manejes y cómo configuras tu sitio, su gramática de programación, etiquetas, entre otros, definirá el posicionamiento en los resultados de búsqueda.

Ahora bien, todo esto suena bonito, pero una de las desventajas es que no permite la segmentación por usuarios, también, el posicionamiento suele ser algo lento, y los algoritmos premian a aquellas páginas que se mantienen actualizadas. En eso nos puede ayudar nuestro siguiente amigo.

El SEM (Search Engine Marketing), o «Marketing de motores de búsqueda», es, como su nombre lo dice, ya marketing puro y duro. Sí, se tiene que pagar, pero a cambio recibimos no solo posicionamientos altos, casi que en los primeros, si es que no es el primero, sino que también es como decirle al bibliotecario que él mismo vaya busque a posibles personas que crea que les pueden gustar nuestro contenido.

El sexo, la edad, el país, los gustos, entre otros, es aquello que llamamos «segmentación». ¿Cómo crees que Facebook o YouTube saben qué anuncio ponerte, y que posiblemente sea de un producto que te interese? Pues alguien ha pagado para mostrártelo, y no pienses que es malo, son herramientas que nos ayudan a filtrar los clientes para cuya demografía está dirigido un producto específico.

Una persona de tercera edad probablemente no vaya a comprar un smartphone de último modelo, en general porque no están acostumbrados a ese tipo de tecnología. Por contra, es mejor usar esos mismos recursos para personas a las cuales les parezca atractiva una propuesta.
Un pro que más gusta a quienes optan por pagar, es que nos obviamos el paso de crecimiento lento, ahorrando mucho tiempo al lanzamiento de la campaña, o en este caso, el sitio web.

Y, obviamente, en el momento en que se deja de pagar, tu sitio deja de existir, y recuerda que cuando hablo de existir, de estar presente, no lo digo literalmente, sino que para las personas, para los usuarios de internet en general dejas de existir.

En primer lugar, porque ese espacio es una bacante para otro cliente de la empresa marketera, que puede ocupar el espacio que antes lo usabas tú. En segundo, porque como humanos, tenemos sesgos, y uno de ellos es el bien conocido WYSIATI (What you see is all there is), que viene a decir que todo lo que conocemos en este momento, es todo lo que existe dentro de nuestro conocimiento de lo que es la realidad.

Quizá puede sonar algo obvio, pero esa es una de las razones por la que Coca-Cola sigue vendiendo a pesar de que no ha cambiado su receta desde prácticamente que inició. Y sí, puede ser deliciosa y todo lo que tú quieras, pero el hecho de ver anuncios por doquier de la bebida nos hace recordar que existe, no nos deja que la olvidemos, y cuando tenemos sed, pensamos «¡Hey, quiero una Coca-Cola!». Eso es justo una de las cosas que queremos generar.

Bien, psicologías aparte. Recordemos que por mucho posicionamiento SEM o SEO que hagamos, si nuestro contenido no agrada, o no genera alguna conexión con el usuario, o simplemente se da cuenta de que no le sirve y no le da beneficios, pues simplemente nada de lo anterior servirá porque ese usuario quedará con una mala impresión del sitio web/producto, y más te verá como un acosador que se anda apareciendo en todos lados, y no queremos eso.

El contenido, lo que nos identifica y nos diferencia de otros, es tan importante como el buen manejo del SEO y del SEM, ya que estos últimos nos darán visitas, pero es nuestro contenido lo que hará que esas visitas sean usuarios orgánicos, y se queden, porque saben y confían en la calidad que se es capaz de brindarles. Repito, el contenido es muy, importante no solo para el crecimiento, sino para el mantenimiento de un proyecto.
Nosotros, por ejemplo, queremos ayudarte a aprender y a crecer con nuestros cursos, y aunque pueda parecer contraproducente para nosotros lo siguiente que voy a decir, creemos que la base de una relación es la honestidad, y esto no deja de ser un negocio.

Y para mantenernos tenemos que asegurarnos que el cliente esté satisfecho con el producto, que sienta que el dinero que pagó vale cada centavo, y eso solo se logra haciendo un contenido de calidad, porque de SEO y de SEM no se mantiene un proyecto. Cada persona que confía en el producto de calidad, es una persona satisfecha, y lo recomendará. Nosotros confiamos en nuestro contenido y estamos siempre pendientes de las necesidades del usuario, porque si el usuario se siente satisfecho con el producto, no solo se mantendrá porque confía, sino que también correrá la voz de sus propias experiencias. Y esto es más importante que lo que nosotros digamos de nosotros, porque es un marketing fáctico.

Otro medio que podemos usar para difundir un mensaje, son las rede sociales. El marketing digital se apoya muy bien de las RRSS, pues es una herramienta con la que se puede facilitar la divulgación de un mensaje, y por qué no, de un producto. Para esto hay que tener plenos conocimientos sobre algoritmos y todas sus variantes que existen, los horarios óptimos, lo permitido publicar y qué es lo más llamativo para los usuarios. Es bien sabido que en esta era de la instantaneidad, la primera impresión (hablando en RRSS) importa mucho para que el usuario y posible cliente se mantenga intrigado y pueda ver lo que ofrecemos.
Y hay que saber de todo eso.

En fin, que el marketing digital, es una mezcla y un buen balance de estos conocimientos. Recuerda, tienes que saber llegar a las personas, llamarles la atención, hacer que prueben el producto, y por supuesto, hacer que se queden. Ya te he mencionado así muy por encima los rasgos más importantes que hay que tener en cuenta para conocer sobre marketing digital, y la marca se sostendrá de todo esto para crecer. Tener en la mente todos los conocimientos profundos sobre este, nos ayudará no solo como marca, sino como usuarios de esta inmensa mar, que es la internet.

Eso es todo lo que tengo para decirte, querido estudiante. Por ahora… Te esperamos para más.